En este artículo, te enseñaremos una gran curiosidad y consejo que le damos a todos los clientes que nos compran productos proPERLA®: cómo aprovechar las gotas de lluvia que caen sobre tu tejado para regar tu jardín.
Para ello, primero debemos explicar qué es el efecto perlado.
¿Qué es el efecto perlado?
Si ya has investigado un poco sobre nosotros, sabrás que una de las principales características de los productos de proPERLA® es su efecto perlado.
El efecto perlado procede de las hojas de loto. Al tocar la superficie de la hoja, las gotas de la lluvia conservan su forma esférica, lo que les permite moverse libremente por ella sin mojarla.
Este fenómeno tiene una gran ventaja: la hoja se autolimpia, porque a medida que la gota resbala por la hoja, va quitando toda la suciedad que tenga.
Esto mismo ocurre con los productos proPERLA®. Cuando se aplican sobre una superficie (tejados, fachadas, suelos, maderas, etc.), esta se vuelve súper hidrófoba y repele el agua, limpiándola de toda la suciedad.
Por tanto, la lluvia al no quedarse pegada en la superficie ni penetrar en ella, se resbala y cae al suelo.
Sin embargo, ¿Qué pasaría si no dejásemos caer toda esa agua?
Cómo puedes regar tu jardín aprovechando el agua de la lluvia
Evidentemente, los días de lluvia a tu jardín no le faltará el agua, pero … ¿y los días que no llueve?
En la Costa del Sol, por culpa del cambio climático y otros factores, hay muy pocos días de lluvia (eso sí, cuando llueve … ¡parece que nos ahogaremos!). Por tanto, si eres de los que esperan a la lluvia para esperar a “regar” tu jardín, sentimos decirte que quizás te lleves un chasco.
Lo primero que se te ocurre es: Conecto la manguera al grifo exterior de la vivienda y empiezo a regar mi jardín.
Esto, aunque no lo creas, consume muchísima agua y te puede salir muy caro. Además, como consecuencia de la sequía, en ocasiones las autoridades hacen cortes de agua.
¿Cuál es el gran consejo que te ofrecemos en proPERLA®?
Si has confiado en proPERLA® para renovar tu tejado, la empresa o aplicador te explicará lo siguiente:
- La lluvia que caiga sobre la teja no quedará impregnada en ella, sino que resbalará.
- Al resbalar, puedes hacer que se “dirija”, hacia los canalones.
- Abajo puedes poner alguna garrafa de agua, dentro de la cual caerán las gotas de agua.
Si ha llovido con mucha intensidad, te podemos asegurar que tendrás alguna que otra garrafa llena. Este es el agua que debes aprovechar para regar tu jardín en épocas de larga ausencia de lluvia.
Conclusión
¿Te ha parecido interesante nuestro consejo? ¿Tienes otra forma de ahorrar agua para regar tu jardín?
Con nuestro método, no gastarás un solo euro en mantener tu jardín en perfecto estado y, además, estás contribuyendo a alargar la vida útil de tus tejas.
Si quieres estar al tanto de más consejos y curiosidades, ¡no dejes de leer nuestro blog para más consejos interesantes!